jueves, 6 de septiembre de 2012


UN ALIMENTO QUE PROTEGE, PREVIENE, MEJORA Y SANA ENFERMEDADES

Desde hace más de cuatro mil años se conocen las bondades medicinales y curativas de un hongo que se cultiva en el Japón llamado Reishi. Su nombre científico es Ganodermalucidium. Los rigurosos estudios de la ciencia han demostrado que este hongo consumido rutinariamente en infusión eleva las defensas del organismo, mejora las funciones de los sistemas digestivo y nervioso. Además es un poderoso desintoxicante que ayuda a eliminar el exceso de toxinas que se acumulan en el organismo por el consumo de alimentos procesados o enlatados a los que se les agregan preservantes, edulcorantes, estabilizantes, saborizantes y otros químicos que con el tiempo generan enfermedades y deterioros a la salud.
El Reishi ayuda a regenerar las partes afectadas del organismo, por eso es formidable en pacientes que han sufrido derrames cerebrales, infartos, cirugías, cáncer, radioterapias o quimioterapias, enfermedades crónicas o tumores. Aumenta la resistencia a las enfermedades por lo que fortalece los mecanismos de prevención de enfermedades, especialmente en niños y en pacientes ancianos.
Está demostrado que el consumo de cacao natural ayuda a reducir en una tercera parte el riesgo de sufrir enfermedades del corazón. Un estudio de la Sociedad Europea de Cardiología de Paris, que evaluó a cien mil participantes, evidenció que las personas que consumían más cacao tenían un 37% menos riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y un 30% menos de presentar derrames cerebrales. Desde hace varios años está comprobado el efecto protector del cacao sobre el sistema cardiovascular. Además, al dilatar las arterias mejora la circulación y aumenta el flujo sanguíneo en todos los órganos del cuerpo. Por lo tanto, es útil en diabéticos, personas con derrames cerebrales o infartos cardiacos, demencia senil, alzheimer, pérdida de la memoria o trastornos circulatorios. También para los niños, para mejorar su capacidad de aprendizaje y su rendimiento físico, intelectual y académico.
Los efectos benéficos del cacao se pierden si es tratado con fertilizantes o insecticidas no naturales. Por lo tanto, debe ser 100 por ciento natural, cultivado sin químicos, secado directamente al sol para enriquecerse con los rayos ultravioleta y triturado molinos en piedra para no ionizarlo con metales.
Recientemente se conoce en el mercado un producto que une los efectos benéficos del cacao con los del ganoderma. Resulta entonces,  un alimento con poderosos efectos curativos y preventivos. Se conoce que este producto contiene más de 200 nutrientes terapéuticos, 150 de los cuales son antioxidantes. Un antioxidante es un producto que ayuda a eliminar desechos oxidados que pueden desencadenar artritis, cánceres, leucemias, enfermedades degenerativas, migrañas, entre otras. Tiene propiedades para combatir los tumores, mejora el sistema inmunológico que es el encargado de protegernos contra las infecciones y enfermedades, y reduce la presión sanguínea. Ayuda a aliviar las alergias, las enfermedades hepáticas, recupera la piel y previene la caída del cabello y lo tonifica.
El cacao potenciado con el ganoderma resulta siendo una mezcla perfecta para ayudar a recuperar y a mantener la salud porque está comprobado que al mejorar la circulación y el aporte de oxígeno a los tejidos, los rejuvenece y por la presencia de más de 150 desintoxicantes combinados, retarda el envejecimiento y previene la presencia de enfermedades al evacuar los radicales libres que son tóxicos y cancerígenos en el organismo. ¡Tomémonos un cacao!